lunes, 8 de febrero de 2010

EL AGUA, UNA FACTURA MUY COSTOSA

Junto con las lluvias que vienen afectando a gran parte del territorio nacional, se presenta paralelamente un problema que parece contradictorio a lo mencionado. Ya que, si bien parecería que esta abundancia de lluvias nos permite acumular este elemento vital para la existencia de los seres vivos, la capacidad necesaria de este líquido poco a poco se va disminuyendo lo que a la larga agudizará la escasez de agua, y esto afectará a todos sin distinción. Con esta situación problemática en la supervivencia en nuestro planeta, cada uno de nosotros podemos aportar a la reversión de esta situación o a que esto vaya empeorando más. Con estos antecedentes ahora toca revertir el cambio climático y mientras esto no sea un hecho por lo menos deberemos ir racionando y conservando los recursos naturales que resultan vitales en la supervivencia humana, en este caso el agua.

            Con estas características nos acercamos nuevamente a una festividad anual que forma una parte importante de nuestras costumbres y tradiciones, y que están muy arraigadas en la cotidianeidad del calendario anual en gran parte del planeta. Sin embargo aunque esta festividad está presente en diferentes partes, la forma en que se celebra varía de lugar a lugar con lo que se genera una variedad de maneras cómo celebrar el carnaval. Es dentro de estas formas y maneras que en nuestro país el agua es un eje central para la celebración de esta fiesta lo cual, como en muchas otras tradiciones, tiene significaciones intrínsecas pero mayormente simbólicas. En este sentido, se toma en cuenta al agua como un elemento de la naturaleza que tiene una función en medio del escenario surrealista que se genera en el carnaval, y por tanto el uso del agua es simplemente una manifestación de este símbolo. Es por ello que a causa del problema de escasez de agua que se va aumentando, deberemos ir modificando la forma de celebrar esta fiesta ya que de lo contrario sería ayudar a que el problema aumente gracias  nuestra “colaboración”.

            Carnaval es la fiesta de las máscaras, donde se va construyendo el mundo al revés y hasta lo sancionado es permitido. Aquí podemos convertirnos y adoptar personalidades diferentes que en su mayoría lleva consigo la jocosidad y el humor para realizar criticas desde la parodia que van acompañadas de la reflexión a cerca de los errores que se pueden estar cometiendo. Detrás de las mascaras existe un mundo diferente de nuestra realidad y en estos días existe la oportunidad de plantear un mundo paralelo que en otra época puede estar oculto simplemente por el miedo o la falta de sinceridad. En esta oportunidad los defectos pueden ser vistos cara a cara aunque matizados, siempre, por el humor incluso nuestros propios defectos que se visten con máscaras, mascaras que somos nosotros mismos viviendo en el carnaval de la vida y que cambiamos a cada momento. Durante el carnaval podemos conocernos de frente y con todas nuestras máscaras saliendo a la luz, y aprovechando esta situación iremos adentrarnos para ir comprendiendo nuestro interior y teniendo la oportunidad de mejorar nuestra vida. Pero debemos comprender que más allá de esta reflexión, con una crisis ambiental en nuestro planeta la existencia humana quedará en la nada frente a la fuerza de la naturaleza, esta naturaleza que tiene al agua como la fuente de vida que corre por sus entrañas y que también nos regala la vida cada día. Por todo ello consideremos seriamente si tendremos la capacidad de pagar esta factura del agua que cada día se hace más insuficiente.