ACCIÓN CHICHEÑA FILIAL-COCHABAMBA, NUEVA DIRECTIVA

Habiendo transcurrido varias gestiones de una ausencia de actividades y dirección en la ciudad de Cochabamba para los residentes chicheños, este domingo 24 de mayo se llevó adelante un proceso electoral con el objetivo de renovar y reactivar a esta representación en la capital del valle. El proceso surgió a partir del reclamo de residentes en Cochabamba quienes hicieron conocer la situación actual de esta organización en esa capital por lo cual Acción Nacional Chicheña realizó la convocatoria para las elecciones programadas para esta jornada. Así, hasta la fecha de cierre de inscripciones de fórmulas solo se contó con una inscrita correspondiente al Frente Pro-Nación de los Chichas. La nómina de directivos electos es la siguiente: Luís Castillo Fernández, Presidente; Mario López Dávila, Vicepresidente; Mercedes Martínez-Jesús López, Secretaría de Hacienda; Jaime Lima, Secretaría de Desarrollo Humano y Cultura; Javier Mercado-Ana Villegas-Guebel López-Grover Pinto, Secretaría de Deportes; Alberto Ruíz-Fernando Gallardo, Vocales. Por otra parte, se cuenta con un equipo de Asesores donde se encuentra: Guillermo Cardozo, Fernando Ruíz, Mario Lima y Daniel Vargas. Es rescatable que dentro de este grupo de nombres se cuenta con la participación de paisanos de varios lugares de los Chichas cambiando la perspectiva hegemónica y logrando una integración importante en esta oportunidad.

            Entre las propuestas presentadas encontramos: 1) Establecimiento de un Consultorio Popular Chicheño con atención de diferentes especialidades y áreas dirigidas a población residente en Cochabamba que implica también la gestión de una sede propia destinada a las labores de Acción Chicheña Filial-Cochabamba. 2) Actividades sociales solidarias para generar recursos y atención inmediata en esa ciudad y otros lugares de los Chichas. 3) Fomento al turismo y cultura de la región de los Chichas, donde se prioriza el posicionamiento de la cultura chicheña en Cochabamba a partir del apoyo a diferentes iniciativas de nuestra población. 4) También se pretende la participación de los Chichas en la Feria Internacional de Cochabamba FEICOBOL. Por otra parte, una de las propuestas más llamativas es la circunscrita al mismo nombre de la fórmula presentada que está vinculada a la Nación Chichas que deberá madurar así como establecer un funcionamiento coordinado con la institucionalidad de nuestra región priorizando a las vinculadas de forma estricta con la Reconstitución de la Nación Chichas como un necesario fortalecimiento e integración de los pueblos del sur.

Con lo mencionado, después de haberse superado la jornada se llevó adelante la posesión y firma del acta correspondiente oficializando a la nueva directiva de Acción Chicheña Filial Cochabamba como la representación necesaria de mujeres y hombres oriundos del territorio chicheño con una nueva visión de los derroteros para esta organización. Asimismo, este es un preámbulo preparatorio rumbo al Congreso de Acción Nacional Chicheña previsto para el mes de diciembre en la ciudad de Tupiza donde se espera una participación mayoritaria de las filiales para proceder al análisis y actualización del Estatuto Orgánico así como la renovación de su Directiva. De esta forma, se reitera el espíritu de integración que debe recuperar Acción Chicheña en todos sus espacios como una parte importante de los nuevos objetivos que se vienen planteando en todo el territorio milenario de los Chichas.

NACIÓN CHICHAS, BIBLIOGRAFÍA

Con el posicionamiento de la temática de la Nación Chichas enmarcada en el proceso de su Reconstitución se ha generado un importante viraje de la visión respecto de varios elementos fundantes en las provincias pertenecientes a este territorio ancestral. En este sentido, la forma en que entendemos la identidad es uno de los puntos de partida para este devenir que se presenta de manera compleja hacia adelante y con un largo camino a seguir en la pretensión de concatenar un pasado importante con la actualidad, teniendo como objetivo mayor la proyección de un derrotero común entre los pueblos herederos de esta colectividad. Así, la temática establecida ha roto con cánones e imaginarios que se habían establecido, rompiendo la integralidad e integración de nuestras comunidades haciendo creer que se tenía la vigencia de varias localías fortalecidas durante el siglo XX, desde el periodo republicano.

            En referencia a la bibliografía enmarcada en la Nación Chichas, sin duda tenemos al Memorial de Charcas como uno de los documentos fundamentales para dar paso y certidumbre de esta organización político administrativa desde tiempos precolombinos con lo cual se deja de lado la crítica de una inmediatez coyuntural de los últimos diez años. Por otra parte, en el Memorial de Charcas se describe la existencia de un idioma propio de este pueblo con lo cual se certifica una de las principales cuestiones presentadas hacia la Nación Chichas en cuanto al cumplimiento de los “requisitos” para ser considerada como un pueblo indígena originario dentro de la normativa nacional. Posteriormente, queda un vacío temporal donde los Chichas quedan en un reduccionismo culturalista, y mucho peor folklorista, que ha mermado en aspectos determinantes de la identidad chicheña; donde obviamente el concepto de Nación Chichas ha quedado totalmente relegado y, casi, olvidado.

            En este último tiempo, con la reemergencia de la Nación Chichas fortalecida y reintegrada, por lo menos temáticamente, se viene trabajando para articular los diferentes lineamientos y elementos que deben construir una visión integral de esta proyección. Así la historia siempre es el punto de partida en el proceso pero que se va enriqueciendo y sobre todo ampliando su espacio y territorialidad para enlazar la Gran Región de los Chichas con una constante de lucha y participación de los hechos históricos de esta parte del continente. Así, la Reconstitución de la Nación Chichas es el bastión para que nuevamente se vaya profundizando las investigaciones y postulados circunscritos en este proceso histórico que ha llevado a la generación de una serie de iniciativas para seguir los principales lineamientos que nos permitan entender mejor el acontecer actual desde diferentes ópticas y perspectivas. Hasta ahora, el Gobierno Municipal de Villazón ha sido el gestor de la publicación de la memoria de un encuentro de investigadores e historiadores que con varios abordajes realizan su aporte en la gran y compleja temática de la Reconstitución de la Nación Chichas. Sin embargo, con artículos varios en otros espacios como ser revistas y periódicos entre otros, se viene posicionando la temática en espacios nacionales. Ahora, quedamos a la espera de distintos trabajos que se han anunciado para su próxima publicación con un aporte significativo y más amplio de lo que significa la Reconstitución de la Nación Chichas y sobre todo para ampliar la bibliografía como una necesidad urgente para nuestros tiempos.

TUPIZA Y LA RUPTURA DE UN LEGADO SEÑORIAL

En una de las esquinas de la Plaza principal de Tupiza se encuentra ubicado un letrero que indica "Municipalidad de Tupiza" en una de las paredes laterales de la casa perteneciente a la familia Eguía Yañez. Esta situación se debe a que la misma fue propiedad de la familia de los apellidos mencionados de la que destaca el José Calixto Yañez de Montenegro Conde de Oploca, amigo y socio de familias potentadas como ser los Aramayo o Gregorio Pacheco entre otros. Este personaje peculiar fue dueño de un extenso territorio chicheño del cual su hacienda principal estaba, justamente, en Oploca donde se producía diversos productos y manjares propios de haciendas exitosas de la época. Pese a esta situación, todavía es cuestionado el título otorgado a sus ascendentes y heredado por José Calixto nombrado por algunos como el falso Conde. Esta introducción viene justificada a raíz de que fue este mismo personaje el primer Alcalde municipal de Tupiza, seguramente respaldado por el poder económico que obligatoriamente se vincula a los nexos políticos  característicos de la elite de ese periodo, que culminó con la abolición de privilegios de la rosca minero feudal.

            Hablar de las gestiones municipales posteriores es complicado ya que no se pudo hacer un seguimiento de lo acontecido por lo que existe este vacío en la línea histórica de Tupiza. No obstante la presencia de terratenientes y potentados mineros pueden mostrarnos una realidad similar en varios espacios del país que más allá de sus separaciones territoriales eran el reflejo de condiciones de la época con mayores desigualdades en todas sus facetas. Mucho tiempo después, recién, en periodos democráticos se comienza con una profundización de participación que se ahondan con la Ley de Participación Popular promulgada en 1994. De esta manera pasamos de una memoria larga hasta una, casi, inmediata donde Tupiza tuvo como principal autoridad a representantes de una identidad construida con varios elementos complejos, que ya de por si nos adentran en una contradicción en cuanto a su estructuración. Si tomamos en cuenta a los "estratos sociales" se debe considerar la preeminencia de sectores medio altos que estuvieron a cargo de la municipalidad donde, no obstante, el tema de género también se manifestó contándose con alcaldesas en varias oportunidades que venían de un trabajo político previo consolidadas como lideresas de sus partidos y por tanto candidatas y alcaldesas. Así, el sesgo señorial identitario determinó aspectos como la detentación del poder político producto de toda una tradición social y económica donde el sector indígena quedó reducido a ser productor, relegado a pequeñas parcelas y muy alejado de la toma de decisiones. De esta manera, las gestiones se vieron favorecidas por candidaturas provenientes de sectores reducidos respaldados por este imaginario construido por la población en general marcada por un pensamiento colonial contradictorio a las raíces de su identidad.

            En el último periodo democrático, característico por el denominado proceso de cambio, gran parte del país ingresó en una compleja crisis social y política donde el orden establecido fue seriamente cuestionado hasta generar una crisis obligatoria de todo el sistema político y social. En este marco, el año 2005 Evo Morales gana las elecciones nacionales superando el 50% y el Movimiento Al Socialismo (MAS) accede al poder de manera histórica lo cual generó una modificación radical del mapa electoral. Así, la oposición, como resabio del antiguo sistema político y de partidos, quedó reducida a la llamada media luna (concentrada en Pando, Beni y Santa Cruz, principalmente). Tiempo después la ola azul fue avanzando hasta lograr victorias también en el oriente boliviano. En este marco, revisando el mapa electoral modificado, y circunscrito en niveles locales, se encontraba un caso interesante dentro del departamento de Potosí donde quedaba una pequeña área que matizaba el azul dominante, y este pertenecía al municipio de Tupiza que no daba paso ni respaldo, en el nivel local, al MAS. Así, el avance e introducción progresiva del partido de gobierno fue lento comenzando por el nivel nacional, de circunscripción, departamental y el último municipal (logrado en las recientes elecciones de marzo de 2015). Con lo sucedido en las elecciones locales pasadas se rompió con ese legado colonial y señorial que se venía sosteniendo desde los tiempos de los terratenientes y los condados en un suceso simbólico significativo dentro de un territorio fuertemente resistido a partir de sustentos imaginarios de una identidad sesgada. Ahora, en un contexto diferente, Tupiza junto a otros cuatro municipios (Villazón, Atocha, Cotagaita y Vitichi) viene encarando un complejo proceso de integración que tiene como objetivo la Reconstitución de la Nación Chichas como un anhelo histórico de la autodeterminación del territorio chicheño ahora bajo la bandera de la autonomía. Lo sucedido con la victoria del MAS en el municipio de Tupiza está muy vinculado con este proceso que deconstruye los imaginarios, cuestionando y replanteando la identidad chicheña, que ahora se presenta como un eje integrador primero territorialmente y luego con su población, como la base determinante del proceso reconstitutivo.

COLOQUIO SOBRE LA NACIÓN CHICHAS

El pasado miércoles 29 de abril se realizó el “Primer Coloquio sobre la Nación Chichas” en el Museo Nacional de Etnografía y Folklore MUSEF de la ciudad de La Paz. En el mismo se tuvo la participación de una investigadora e investigadores de los Chichas con un espíritu de integración y hermandad de nuestro pueblo. Así, el programa se distribuyó en cuatro exposiciones de la siguiente manera: Edgar Murillo “La Nación Chichas en el Memorial de Charcas”, María Elena Chambi “Levantamientos indígenas en los Chichas”, José Yañez “Avances y proyecciones de la Nación Chichas” y Heberth Peredo “Tareas pendientes para la Reconstitución de la Nación Chichas”. Asimismo, se proyectó el video “Halcón Exiliado” producido en el marco de la Reconstitución de la Nación Chichas por la banda ENERPOL. En este sentido, se tuvo la participación masiva de asistentes al evento donde se pudo intercambiar criterios en un diálogo abierto entre panelistas y participantes.

Como es previsto, dentro de las intervenciones emergió el ineludible debate sobre la extensión de los Chichas en el territorio actual el cual se extiende en tres provincias (Nor Chichas, Sud Chichas y Modesto Omiste) con sus cinco municipios (Villazón, Tupiza, Atocha, Cotagaita y Vitichi). En este sentido, se hizo presente el reclamo sobre pertenencia de todos estos pueblos a la Nación Chichas y la necesidad de su articulación para el logro de mayores objetivos. Por otra parte se pretende posicionar la temática y proyecciones de la Nación Chichas en diferentes ámbitos y espacios donde la sede de gobierno es un eje central del debate nacional donde se ha tenido una preminencia del aymara centrismo o andino centrismo que ha sido causante de sesgos dentro de las ciencias sociales a nivel nacional. Contradictoriamente los aportes desde investigaciones extranjeras, principalmente argentinas, han sido las que mayor aporte dieron a los Chichas con la importancia debida que tuvo y tiene como sociedad preincaica.

            De esta manera, la Nación Chichas pretende fortalecer su planteamiento y romper las limitaciones territoriales en una visión desde afuera en complementariedad con lo que se trabaja en el propio espacio chicheño de manera sostenible y estructurada, siendo este coloquio el punto de partida para este derrotero. Queda mucho por trabajar en el amplio y complejo proceso reconstitutivo y es por eso que el tema y las proyecciones no deben ser relegadas de los espacios políticos, sociales y académicos, entre otros, para que el anhelo histórico del pueblo de los Chichas esta vez retome la lucha frontal en la búsqueda de su autodeterminación ahora bajo la bandera de la Reconstitución de la Nación Chichas. Como cierre han sido adelantados tres trabajos de investigación próximos a ser publicados en la sede de gobierno, los cuales también han sido motivados por este proceso histórico en el que nos encontramos y con el cual seguimos comprometidos.