El gobierno local es uno de los más cercanos a la
población y por tanto está al corriente de las principales necesidades y
demandas de la misma. Esta situación tuvo que superar un proceso histórico,
político y administrativo para que en la actualidad los municipios tengan un
rol importante respecto del desarrollo de cada comunidad con características
propias en una gran variedad dentro de todo el territorio nacional. Así, en sus
orígenes, se tenía una gran dependencia de los gobiernos nacionales comenzando
en la designación de las autoridades locales que progresivamente fueron
cobrando autonomía luego de muchos decenios, donde la Participación Popular
tuvo un papel importante y también el actual proceso donde se pretende
consolidar la autonomía de los gobiernos municipales, junto a su estructura y
su capacidad de toma de decisiones, contando con un órgano ejecutivo y un
legislativo para llevar adelante la gestión elegida cada cinco años. Asimismo,
es importante la división entre estos órganos de manera independiente, cada
uno, lo cual es fundamental en cuanto a la fiscalización e independencia entre
instancias y una gestión más efectiva, en el mejor de los escenarios esperados.
No obstante, esta situación trajo también algunos
conflictos de ingobernabilidad, desde el plano netamente político y
circunscrito a esta división entre órganos que en algunos casos suelen
conformarse en espacios de oposición no propositiva ocupándose solo de
obstaculizar al ejecutivo. Desde este punto de vista, lograr una gobernabilidad
deviene en una relación compleja y conflictiva desde adentro del gobierno
municipal. Este ha sido, en algunos casos, uno de los motivos para tener
gestiones ineficientes y poco relevantes por los conflictos internos que suelen
producirse en la pugna entre ejecutivo y legislativo donde los mayores
perjudicados son los y las habitantes del municipio. Otro de los factores para
una gestión poco efectiva viene de los mecanismos y formas de distribuirse el
presupuesto que por lo general es repartido o dividido entre distritos donde
nuevamente se generan conflictos, esta vez desde la sociedad civil organizada,
por lo cual los montos asignados al municipio se van diluyendo en esta repartija,
posiblemente legítima pero, que incide en la inexistencia de obras de magnitud,
las cuales deben ser canalizadas con otros recursos y mediante la
coparticipación del gobierno departamental y nacional, lo que resulta en cierta
dependencia hacia estas instancias mayores para poder contar con obras de
relevancia y de beneficio generalizado para el municipio.
En otra arista se encuentran los funcionarios y
funcionarias del municipio donde se puede tener un problema muy complejo cuando
se establecen pugnas de poder que confrontan, por lo general, con el ejecutivo
aportando un importante porcentaje a la ingobernabilidad desde adentro y que
puede recaer en varias formas de boicot a la gestión. Así, cuando se realiza el
cambio de autoridades se ingresa en un proceso forzoso para la negociación
entre la dirigencia y el ejecutivo para que la gestión no se vea truncada de
forma recurrente, pese a que las autoridades hayan sido legítimamente elegidas
por voto directo, frente a funcionarios y funcionarias atrincheradas en
organizaciones, muchas veces intransigentes y con muy poco sentido propositivo
y proactivo. De esta manera, la capacidad y competencias que deberían tener los
y las funcionarias municipales deberían ir en concordancia con las exigencias
profesionales y técnicas de cada puesto para contar con mayor eficiencia en los
procesos y la ejecución de los POAs, evitando que al final de gestión se vean
revertidos los recursos programados. Entonces el proceso de especialización dentro
de los municipios debería ser una constante para funcionarios y funcionarias, y
otras figuras de trabajadores municipales, para que los cinco años de gestión
de cada autoridad pueda resultar beneficiosa para la comunidad en su conjunto.
El trabajo en el municipio sin duda es uno de los más exigentes y requiere de
un esfuerzo y compromiso con la comunidad más allá de horarios, porque tenemos
de por medio el Desarrollo Económico Local como un horizonte al que debemos
acercarnos con un trabajo acorde desde adentro de los municipios, mucho más con
funcionarios oriundos del municipio.