lunes, 27 de enero de 2014

LA CASA DE LA JUVENTUD

Hace algunos años, (exactamente no se cuántos), existía en Tupiza un espacio muy sugerente con pinturas murales que adornaban su frontis; este lugar se ubicaba en el comienzo de la avenida Saturnino Murillo haciendo un reflejo interesante con el Colegio Nacional Mixto Suipacha como un eco de lo que deberían ser los adolescentes y jóvenes del lugar. Este espacio citado era denominado como la “Casa de la Juventud”, ante la cual (lamentablemente) no tenía casi ningún interés en ese momento y lo único que pude captar entre las actividades que se realizaban dentro eran ensayos de danza de algún grupo de ballet regional y teatro, entre otras manifestaciones del arte y la cultura. De esta manera, y sin mayor expectación al respecto, la Casa de la Juventud desapareció y dejó de estar abierta para cumplir los objetivos previstos en este ambiente público. En la actualidad las pinturas existentes en la pared exterior han desparecido devaluando el trabajo realizado por sus autores y haciendo uso de una decisión, posiblemente, poco acertada para la que se denomina, todavía, “Capital Cultural de la Juventud”.

De esta manera, posiblemente uno de los principales motivos para el cierre de esta Casa sea el desinterés que se tiene desde las diferentes instancias de gobierno por promocionar y fortalecer actividades que potencien el desarrollo humano de este grupo poblacional. No obstante, como una compensación tenemos en frente a iniciativas muy superficiales que pretenden llenar este vacío con proyectos que no pasan de la construcción de canchas las cuales no tienen una planificación cierta o que pretenda cumplir algún objetivo mayor y más integral. En esta misma línea, basta ver los espacios verdes que existían en lugares como Chajrahuasi donde se podía practicar varias disciplinas de manera gratuita y en contacto, casi, directo con la naturaleza, que ahora son inexistentes por una falta de planificación urbana en el Municipio. Así, todas las actividades destinadas a adolescentes y jóvenes, generalmente, están siendo impulsadas por otro tipo de instituciones que deben suplir estas deficiencias y carencias de la población. De esta manera, la visión y el interés en este grupo etario es todavía miope siendo que un importante porcentaje de población se encuentra en este conjunto lo que ha generado un fenómeno denominado como bono demográfico que debe ser aprovechado por las instancias de gobierno en la actualidad para tener los réditos a mediano y largo plazo.

Habiendo trabajado en otras instancias, la experiencia ha demostrado que existen un sinnúmero de actividades, planes y proyectos que se pueden realizar en favor de estos actores sociales los cuales, en la actualidad, vienen cobrando fuerza a partir de la organización y representatividad que van conquistando. Asimismo está la contraparte desde los espacios formales de brindar oportunidades de superación o simplemente de sano esparcimiento los cuales van madurando en proyectos de mayor impacto para la sociedad. El Municipio de Tupiza, y sobre todo el área urbana, viene sufriendo el efecto perverso de la sociedad global donde el desenfreno va calando en los adolescentes y jóvenes habitantes del lugar lo cual está muy ligado con la falta de iniciativas y actividades por realizar. En la actualidad, la Casa de la Juventud es un recuerdo fugaz para Tupiza, pero es una muestra de la iniciativa que pudo haber existido en algún momento para trabajar con los ojos de las juventudes. La Casa de la Juventud podría convertirse en un importante espacio de encuentro para las y los adolescentes y jóvenes, los cuales vayan planteando y madurando sus propias ideas y proyectos; pero ante su inexistencia es simplemente un eco distante de buenas intenciones que terminan en lamentos por la “decadencia” progresiva de las nuevas generaciones.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Furza Tupiza,bastion de la libertad